Desde hace tiempo venía teniendo la idea de montar lugar de co-working. Para losque no lo sepáis, este tipo de sitios son lugares donde se puede trabajar con otra gente con la que no tienes nada en común en muchos casos. Bueno… nada en común en teoría, muchos son creativos, autónomos, emprendedores, etc.
El caso es que compartes lugar y los tienes en mesas cercanas. Un buen espacio quizás con el que hacer contactos y quizás emprender un negocio nuevo. Las posibilidades son infinitas y nunca se sabe dónde acabará todo ¿no?
Mi idea es hacer un lugar amplio, luminoso y con el mejor mobiliario, que junto a conexión a Internet a la mejor velocidad sea una referencia en Burgos, mi ciudad. La verdad esque la competencia no es muy fuerte, por lo que, si conseguía “marcar territorio” y sacar buena distancia a la competencia, podía tener un buen trozo del mercado.
Alquilé un local que llevaba mucho tiempo cerrado en el centro y le hice una reforma de impresión, me gasté bastante dinero, pero sabía que este era el momento y que las oportunidades no hay que dejarlas escapar.
Quedaban los muebles, algo bastante más importante de lo que a simple vista pudiera parecer. Buscaba algo diferente y me puse a mirar por Internet, cuando vi a Dismobel. Seguí navegando por su página y vi unas mesas y sillas que eran justo las que buscaba.
Así que nada al día siguiente, les llamé y me confirmaron que tenían todo y les pedí consejos sobre unas estanterías que al final también me mostraron en su catálogo online. Total, que efectúe compra y en pocos días lo tenía todo listo para montar.
Buena calidad y originalidad, nada de productos que tiene todo el mundo y que nada más ver la silla ya sabes de que famosa multinacional sueca es. Buscaba diferenciarme y eso abarca la mayor parte de puntos que uno pueda. Así que finalmente pude contar con el espacio Co-Working que quería.
Llevamos algo más demedio año y por el momento las cosas van francamente bien, con un nivel de co-workers bastante alto que de seguir así me harán resplantearme si quizás en año y medio o así intentar comprar la parte del local que no alquilé y da de esquina.
Además del negocio en sí, aprovecho para colaborar con otros 2 co-workers más en un proyecto de una App de móvil que nos tiene bastante enfrascados, así que emprender parece que ha sido una buena idea y de momento solo tengo buenas palabras con mi negocio.
Eso no quita que todos los principios sean duros, y que al final uno es autónomo y tiene que pagar a final de mes genere o no genere. Quiero, hablando de eso, intentar cada mes tener un ciclo de conferencias de emprendedores, que arroje algo más de luz a algunos co-workers que veo que trabajan duro, pero que en algunos momentos se desesperan por lo complicado que en ocasiones es salir del agujero.
El co-working, una manera creativa de generar riqueza y oportunidades
Los políticos deberían darse una vuelta por estos espacios para ver lo como luchan los autónomos por innovar y emprender, pese a las pocas facilidades que el gobierno les da. Este tipo de empresas, al igual que los autónomos, deberían haber contado con ayudas, pues la innovación, el I+D es lo que realmente saca a un país y marca la diferencia.
Ahora que parece haber acabado lo peor de la crisis, seguimos viendo como el mercado inmobiliario y el empleo estacional sigue siendo la principal fuente de empleo para los parados. Al final, parece que hemos aprendido bastante poco de la crisis.
Para los autónomos una pequeña ayuda que no soluciona nada y solo vale para los que están empezando, con lo que podemos decir que estamos parecidamente. ¿Cuál es la razón por la que el Gobierno sigue dejando de lado a los autónomos y emprendedores en nuestro país?
La respuesta no la sabemos, pero mientras se lo piensan, nosotros seguimos dándole a la cabecita y luchando por un futuro mejor, donde los españolitos no solo tendrán formación, también oportunidades y una cultura emprendedora que ayuda a que cada vez seamos un país más moderno y que no dependa del pelotazo inmobiliario y del sol y la playa.
