Los repartidores de empresas populares como Glovo o Amazon, se quejan de la falta de sensibilidad y empatía con el sector, por parte de la población española. Muchos de ellos, denunciaron, que la gente está haciendo un montón de pedidos no necesarios, como ropa, patas de jamón, vino, etc, exponiéndose de esa forma, al contagio. El coronaviurs, ha aumentado las ventas online, pero no solo de artículos de primera necesidad, sino de todo tipo de productos. Es por esto, que a pesar de que muchos bares, restaurantes y muchos comercios están cerrados, los repartidores, tienen mucho más trabajo. Así, se están recogiendo firmas para prohibir que la gente pida productos que no sean básicos durante el confinamiento.
Y es que hay muchos repartidores que trabajan para empresas de mensajería urgente y en estas, los pedidos han de llegar a los domicilios en 24 horas, y con el encierro, se están haciendo pedidos totalmente innecesarios, sobre todo ropa. La irresponsabilidad de buena parte de la población está haciendo que muchas personas se expongan al virus.
Muchos profesionales trabajan a pesar del confinamiento
Desde el 14 de marzo, cuando se decretó el estado de alarma, todo el mundo promovía el “Quédate en casa”.Pero los repartidores a domicilio, los sanitarios, farmacéuticos, agricultores, banqueros, personal de limpieza, fuerzas y cuerpos de seguridad del estado y un pequeño listado más de profesionales, como los transportistas o aquellos relacionados con el sector del transporte, siguen trabajando, y con esto, se están arriesgando al contagio.
Somos conscientes de que los repartidores a domicilio hacen un servicio esencial, pero hay que tener en cuenta, que dependiendo de su uso, pueden dejar de serlo. Es decir, los repartidores a domicilio cumplen una importante
“Salgo cada día con unos 150 paquetes. Tengo que estar hasta las ocho de la noche repartiendo”, Lo veo en la mercancía. Además, han aprovechado para echar a algunos compañeros y nos sobrecargan de trabajo”, dice un profesional a El Confidencial. Esto no se puede consentir. Es necesario que la población tome conciencia de la situación que se está viviendo. Es algo excepcional, sí, nunca nos ha pasado, es cierto, pero no creo que resulte tan difícil colocarse en el lugar de los profesionales que trabajan durante la pandemia.
Los repartidores se quedan hasta las 8 o 9 de la noche para llevar distintos artículos a domicilio e incluso, se atreven a hacer devoluciones súper absurdas. Con esto, se exponen los repartidores, pero también los clientes. Es, por tanto, esencial, tomar conciencia del riesgo que ello supone.
“Ayer mismo hice una devolución de una funda de ipad. Empresas como Amazon, por ejemplo, están dando la opción de devolver hasta el 15 de junio. La gente que decide hacerlo ahora es la que me enfada”, cuenta el mismo repartidor a El Confidencial.
Por su parte, muchas empresas están haciendo descuentos en sus tiendas online, lo que ha provocado un aumento de los pedidos a domicilio, Y hablamos de Zara, Amazon o Privalia, que intentan salvar sus ventas durante el encierro con precios especiales cuando no estamos en rebajas. “Las mensajerías urgentes apenas entregamos mercancía de primera necesidad. Se nos está obligando a trabajar llevando todo tipo de ropa de Inditex o productos de Amazon que no corren ninguna prisa”, continua este trabajador.
Ya apenas hay coches en las calles, pero sí repartidores. “Teniendo en cuenta que hay un montón de restaurantes cerrados, como un 70%, yo sigo llevando los mismos pedidos que antes del confinamiento”, dice un trabajador de Uber Eats, sobre todo pizzas.
Muchos creen que aunque no haya contacto con la gente, pero el paquete puede llevar el virus. “Ahora tocas el portero, le dices que tienes un paquete y se lo dejas en el ascensor, o le hablas de lejos. Pero prácticamente ya no tenemos contacto con las personas”, asegura un repartidor.
“Me han dejado una notita en la puerta que decía que no tocara el timbre ni el pomo y que dejara la comida en la puerta. Pero luego cogen la bolsa que la he estado llevando todo el rato o la comida que la han estado haciendo y tocando otras personas… incongruencias”, dice uno de estos profesionales.
A consecuencia de esto, los repartidores han puesto en marcha una campaña, #NoLoNecesitas para recoger firmas y que se prohíba el reparto de artículos que no sean de primera necesidad.
Y tú, ¿eres de los que están pidiendo artículos sin ton ni son o ya has tomado conciencia del peligro que ello supone?
Nosotros seguimos teniendo las mismas ventas online que antes del confinamiento, aseguran en HHG, una empresa especializada en la venta de ropa al por mayor. Y la verdad es que nuestros repartidores no han tenido ningún problema en los repartos.